Como enseñar a nadar a un perro

Aprende cómo hacer para enseñarle a nadar a un peludito y cuáles son los beneficios de esta actividad para su vida

    Tabla de contenidos

  1. No todos los perros son nadadores naturales
  2. Beneficios de nadar en tu perro (y vos)
  3. ¿Cómo enseñar a mi perro a nadar?
  4. ¿Cuándo enseñar a mi perro a nadar?
  5. ¿El agua de la piscina puede afectar a mi perro?
  6. ¿Cómo puedo hacer que a mi perro le guste nadar?
  7. ¿Puedo enseñar a nadar a un perro viejo?

¿Tu perro corre entusiasmado hacia cualquier cuerpo de agua que ve? Cómo enseñar a tu perro a nadar es diversión asegurada para tu peludo.

Tal vez tu perro se queda mirando el agua con miedo, pero con ganas de meterse un chapuzón, o tal vez tu peludo pega un salto, se moja y regresa como puede a tierra firme. 

O puede que tu perro trate al agua como su enemigo y trate de hacer lo posible por mantenerse seco. Cada perro es distinto y no a todos les gusta mojarse pero ¿todos los perros saben nadar?

En este artículo te contamos si los perros tienen la capacidad de nadar y cómo puedes enseñarle a nadar a tu peludo, para que disfrute el agua sin preocupaciones. 

No todos los perros son nadadores naturales

Tal vez tienes la idea de tu perro como un pez en el agua, por los videos de grandes perros nadando, pero no siempre es el caso. 

Dependiendo de su raza, es posible que tu perro se desenvuelva con naturalidad en el agua o que nadar le suponga un reto. 

No obstante, tanto si a tu perro le gusta zambullirse, como si prefiere quedarse en tierra, es esencial para su seguridad que aprenda a sentirse cómodo en el agua y cerca de ella. 

Puede que quieras pasear en bote, ir al río o disfrutar de unas vacaciones en una casa al lado de un lago. 

Incluso puede que tengas una casa o un familiar con piscina en el jardín, donde puedan ir seguido y tu perro tenga la oportunidad de aprender y disfrutar de nadar. 

Si uno piensa en el propósito tradicional de una raza, resulta obvio que algunas se sentirán atraídas por el agua. 

Algunas razas nacieron para nadar porque se desollaron para trabajar en el agua o cerca de ella. Pensemos en el labrador retriever o el retriever de nueva escocia. Estos perros fueron criados para recuperar aves acuáticas para el cazador. 

Labrador retriever: sus patas palmeadas (adaptación física que les permite nadar de manera más eficiente) y su pelaje resistente al agua los convierten en excelentes nadadores y recuperadores. 

Perro de agua portugués: esta raza se usaba históricamente para la pesca y el salvamento acuático, tiene patas palmeadas y un pelaje impermeable. 

Terranova: a pesar de su gran tamaño, los terranova son perros nadadores increíblemente fuertes. Su espeso pelaje doble, sus patas palmeadas y su instinto para el rescate acuático los convierten en excelentes nadadores y salvavidas. 

Retriever de Chesapeake: criados originalmente para recuperar aves acuáticas durante la caza, estos retriever tienen un pelaje denso y aceitoso que repele el agua. Son potentes nadadores y son conocidos por su resistencia y su capacidad de recuperación en el agua.

Hay algunas razas que parecen saber nadar desde el momento que ven un cuerpo de agua. Otras razas simplemente no le ven sentido a nadar. 

También hay otros perros que tienen una distribución de peso que no les permitiría nadar muy bien sin chaleco salvavidas. 

Las razas de patas cortas o cuerpo largo también pueden tener problemas en el agua. Entonces ¿pueden nadar todos los perros?

Aunque es un mito que todos los perros son nadadores natos, con un chaleco salvavidas y unas clases de nado, toda clase de perro debería poder moverse con seguridad en el agua. 

Beneficios de nadar en tu perro (y vos)

La natación es una excelente forma de ejercicio para perros (como para humanos), ya que proporciona un entrenamiento de bajo impacto para todo el cuerpo que fortalece los músculos y mejora la salud cardiovascular. 

La flotabilidad del agua también reduce la tensión en las articulaciones, por lo que es ideal para perros con problemas de movilidad. 

La natación también puede ser una experiencia de unión entre dueños y sus perros. Pasar tiempo en el agua fomenta la confianza, crea una conexión emocional más fuerte y ofrece una oportunidad de estimulación física y mental para el perro (y también para los humanos). 

¿Cómo enseñar a mi perro a nadar?

Si tu perro no puede nadar de manera natural pero tiene ganas de meterse al agua y solo necesita un golpe de confianza puedes probar:

Primero se recomienda calentar antes de cualquier actividad física para ayudar a preparar el cuerpo del perro para la actividad y prevenir lesiones:

Se puede empezar caminar y luego aumentar la intensidad trotando y jugando.

Una buena rutina de calentamiento también provoca que toda la experiencia de adiestramiento sea más agradable para tu mascota.

Durante el calentamiento, es muy probable que tu peludo haga sus necesidades, lo que significa un menor riesgo de accidentes en el agua. Los perros suelen hacer pis o caca justo después de nadar, por lo que es recomendable llevar bolsitas para evitar dejar rastros. 

Al agua

Introduciendo a tu mascota al agua gradualmente, llamándolo, y asegurándote que se siente seguro y cómodo. 

Empezá en zonas poco profundas y usa el refuerzo positivo para que agarre confianza, como elogios y estímulos, para recompensar a tu mascota por su esfuerzo. Esto ayudará a asociar el nado con una experiencia positiva. 

No todos los perros disfrutan nadando, por lo que es esencial respetar sus preferencias y no obligarles a meterse en el agua si muestran signos de ansiedad o miedo. 

Lo mejor es empezar en una piscina con entrada gradual (escalones) o un estanque tranquilo. Deja que tu perro explore el agua a su ritmo. 

Entra al agua antes que tu perro

De esta manera puedes tener un mejor control y podes ayudarle si sucede algo. 

Si predicas con el ejemplo, es más probable que tu perro se una al agua y agarre confianza más rápido. 

Mantente cerca de él para apoyarle y tranquilizarle. A medida que el perro se sienta más cómodo, sujeta suavemente su cuerpo, colocando tus manos bajo su vientre, esto le proporcionará más estabilidad y confianza en el agua. 

Una vez que tu perro adquiera confianza en aguas poco profundas, llévalo gradualmente a una zona un poco más profunda. Controla su nivel de comodidad y ofrecele ayuda cuando sea necesario. 

Utiliza las manos o un juguete para animar a tu mascota a mover las patas y desplazarse por el agua. Elogia y recompensa sus esfuerzos.

Asegúrate que la zona de baño es segura, está libre de peligros y es fácilmente accesible para cuando tu perro quiera salir del agua. 

Como dueño de una mascota, debes supervisar siempre a tu perro mientras está en el agua, proporcionarle las medidas de seguridad necesarias, incluso un chaleco salvavidas si podes encontrar uno y estar atentos ante cualquier peligro potencial en la zona de aguas abiertas, como corrientes fuertes o aguas profundas. 

¿Cuándo enseñar a mi perro a nadar?

Se recomienda exponer al cachorro a una gran variedad de sonidos, superficies y entornos como el agua desde una edad temprana.

Los cachorros pueden jugar en el agua en sus propios términos, pero se aconseja esperar a que el cuerpo del perro este completamente desarrollado antes de incluir la natación en su vida.

Una edad recomendada para introducir a los perros jóvenes en la natación es la de 1-2 años. 

¿El agua de la piscina puede afectar a mi perro?

Las piscinas suelen ser tratadas con productos químicos como el cloro para mantener limpia el agua. Aunque estas sustancias son seguras para los humanos en cantidades controladas, pueden irritar los ojos, la nariz y la piel del perro.

Es importante asegurarse de que el agua de la piscina está correctamente equilibrada y de que se reduce al mínimo la exposición del perro a los productos químicos.

En cambio, las aguas abiertas, como ríos, mares y lagos, tienen una composición natural, pero pueden tener bacterias o parásitos. 

Averigua las condiciones del agua para evitar cualquier riesgo, ya sea en una piscina o en aguas abiertas. 

¿Cómo puedo hacer que a mi perro le guste nadar?

La clave es no intentar que a tu perro le guste el agua. Deja que se familiarice con este elemento a su propio ritmo. 

Elogialo a menudo y demostrale que nadar puede ser muy divertido, una vez que se sienta bien en el agua, enseñarle a nadar a tu mascota será muy entretenido para ambos. 

¿Puedo enseñar a nadar a un perro viejo?

Perros de todas las edades pueden aprender a disfrutar del agua si te adaptas a ellos y les preparas para el éxito. 

En el caso de los perros mayores, hay que vigilar la temperatura del agua y evitar que se enfríen. 

La natación es una excelente forma de ejercicio para los perros ancianos, ya que es suave para sus cuerpos y de mantenerlos activos.