- Tipos de arena para gatos
- Método de limpieza y frecuencia de limpieza del arenero
- Cantidad y frecuencia de recambio de la arena
- Cómo empezar a usar arena con un gato cachorro
- Elegir arena para tu gato de acuerdo a su edad
- Tips para el uso de arena sanitaria
- Conclusión
Tabla de contenidos
Los gatos son las mascotas más limpias.
Su tamaño y sus costumbres hacen de los gatos animales extremadamente limpios.
Pero su limpieza no termina solamente en la costumbre que tienen de acicalarse sino que también tienen arraigadas costumbres de limpieza que tienen que ver con la forma en la que defecan.
Genéticamente, el gato tiene incorporada la utilización de una zona de su territorio para evacuar.
Esta zona suele estar en la periferia de su territorio: siempre tratará de acudir a un sitio limpio para defecar y orinar
Por esta razón, los humanos le proveemos a los gatos de un lugar limpio para hacer sus necesidades: el arenero.
Este es su accesorio más importante ya que es donde hará sus necesidades.
En la naturaleza, los gatos cavan agujeros en la tierra o arena anticipándose al ritual de defecación.
Posteriormente, hacen sus necesidades y, una vez terminada la labor, huelen sus heces y las entierran porque buscan ocultar la evidencia para no despertar la sospecha de sus depredadores naturales.
Por esta razón, la arena es de suma importancia para reforzar este comportamiento natural en habitats que le son ajenos (como los lugares en los que habitamos los humanos.
Tipos de arena para gatos
El término “arena para gatos” parece sugerir que la arena es un producto genérico con un bonito empaque.
¿No puedo acaso usar arena común para contener los desechos de mi gato?
La realidad es que existen distintos tipos de arena que tienen ciertas características que son deseables para manejar los desechos de nuestro gato.
Existen en el mercado tres tipos de arena: absorbentes, aglomerantes y biodegradables.
Cada una tiene particularidades que se balancean a la hora de considerar el precio y su efecto en la limpieza de la orina y las heces de nuestro gato.
- Arenas absorbentes: están hechas con sepiolita, un filosilicato de gran porosidad y de baja densidad que se usa como absorbente industrial. Como ventaja, son baratas y de fácil disponibilidad. Como desventaja, es necesario reponerla a menudo ya que de lo contrario el intenso olor a amoníaco será difícil de tolerar. Además, ya que absorbe líquidos, será necesario revisar a la hora de limpiar para poder retirar de forma correcta los desechos sólidos.
- Arenas aglomerantes: están hechas principalmente de bentonita sódica, mineral que tiene la capacidad de “hincharse” en contacto con el agua. La arena aglomerante tiene características similares a la arena absorbente pero, además de absorber líquidos también puede aglomerarse alrededor de los mismos formando una suerte de sólido de fácil limpieza ya que podremos recoger los desechos con una pala y hará que no tengamos que limpiar tan seguido ya que los olores se encapsulan con el aglomerado. Como desventaja, a la hora de limpiar un arenero para gatos relleno de arena aglomerante tendremos que hacerlo a conciencia ya que de lo contrario quedarán rastros de los aglomerados que harán que el arenero huela.
- Arena de sílice: está hecha con gel de sílice, el mismo que viene en las cajas de zapatillas para proteger al calzado de la humedad. Este gel absorbe la humedad y los olores intensos, manteniendo el arenero seco y sin olor. No produce polvo y tiene un buen precio pero la mayoría de los gatos no se adaptan a ella ya que no se asemeja a la experiencia natural de los gatos. En el mercado boliviano no se consigue ninguna arena comercial de sílice.
- Arenas biodegradables o ecológicas: este tipo de arena tampoco se consigue en el mercado local pero es la alternativa más “verde” ya que está hecha con materiales naturales como fibras vegetales o aserrín. Es buena atrapando olores, no levanta polvo y además es biodegradable pero es posible que contenga aditivos y que tu gato no se adapte a usarla.
Método de limpieza y frecuencia de limpieza del arenero
La forma y la frecuencia con la que limpiemos el arenero es vital para la higiene de nuestro gato.
En la medida de lo posible, la caja de arena debe ser limpiada todos los días usando una pala sanitaria para gatos.
Esto porque está demostrado que los gatos detectan los olores 15 veces mejor que los humanos.
Por este motivo, los gatos rechazan areneros que huelan mal por una acumulación de orina o heces.
Si tu gato tiene su arena sucia por mucho tiempo, empezará a buscar otros lugares para hacer sus necesidades dentro de tu casa: dormitorios, sala, baños, etc.
Además, algunos gatos pueden intentar comerse su arena, así que debes asegurar que ni las heces ni el orín se acumulen en el arenero.
Ahora, si no disponés del tiempo o las ganas para limpiar el arenero de tu gato todos los días, tendrás que monitorearlo para asegurarte de que nunca tenga un olor pungente a amoniaco, que es un signo de que pide una limpieza urgente.
Entonces ¿cuál es la forma correcta de limpiar el arenero de mi gato?
El proceso consiste básicamente en rastrillar la arena usando una pala sanitaria, separando así los residuos de la arena “sana”.
Posteriormente colocamos los residuos en una bolsa pequeña y desechamos.
Podemos declarar limpio un arenero siempre y cuando no queden residuos grotescos de orín o heces ni tampoco tenga un fuerte olor.
Cantidad y frecuencia de recambio de la arena
Habiendo entendido el método de limpieza de un arenero, la siguiente pregunta es ¿cada cuanto debo cambiar la arena de mi gato? Y ¿cuánta arena debo reponer?
La respuesta a estas dos preguntas es: depende.
Como tu gato escarba en la arena para ocultar los rastros de su presencia fecal, es necesario que tenga una cierta cantidad de arena para que lo pueda hacer cómodamente.
Lo aconsejable es que tengan cierta altura de arena para escarbar y sentirse cómodos en el proceso. En gatos cachorros, esta altura es de 2 cm, en gatos adultos es de 5 cm.
La cantidad de arena usada para lograr esta altura tendrá que ver con el tamaño del arenero que, a su vez, también tendrá que ver con el tamaño y la edad de tu gato.
El tipo de arena que se usa es uno de los factores decisivos: las arenas aglomerantes tienden a ser más duraderas por que encapsulan los desechos y los separan de la arena "sana"
Este tipo de arena debe cambiarse completamente una vez cada 3 semanas ya que es posible dejar un arenero limpio en el día a día al recolectar solamente las aglomeraciones de orín y heces.
Cuando se usan arenas no aglomerantes o piedras sanitarias, estas deben cambiarse por completo al menos una vez a la semana ya que no es posible separar el orín por lo cual requieren un cambio más asiduo.
Cómo empezar a usar arena con un gato cachorro
Al traer un gatito cachorro a casa debemos estar preparados con todos los recursos y elementos adecuados para recibirlo.
La arena es fundamental en este proceso.
Es importante introducir al gatito recién llegado al arenero ya que, instintivamente lo utilizará.
Desde que nuestro gato tiene 3 semanas de vida, solamente el hecho de ponerlo encima de un montón de arena logrará que él sepa para qué sirve.
Si el gatito convive con su madre, ella le enseñará al gatito a utilizarla alrededor de los 21 y 30 días de vida.
Para gatos recientemente destetados o neonatos, basta con colocarlos encima de un arenero para que puedan encontrar la ubicación y entender para qué sirve.
Si el presupuesto lo permite y si tu gato no logra acostumbrarse a un solo tipo de arena, se pueden probar varios tipos de esta hasta que el gato encuentre su arena predilecta.
Para condicionar el uso de la arena de parte de tu gatito, es importante premiar el comportamiento deseado de manera de hacerle entender que queremos que defeque en su arenero.
Para lograr esto, podemos darle bocadillos o esperarlo afuera de la caja con algún juguete para que asocie el momento de usar su arenero con el placer y la diversión.
Instintivamente, para tu gato la arena y el arenero son escenarios ideales para defecar, nuestra función es presentársela y mantener su zona de evacuación limpia y agradable.
Elegir arena para tu gato de acuerdo a su edad
Las arenas de grano más fino son ideales para gatitos cachorros como Hello Kitty Azul o Hello Kitty Rosa. Los granos grandes pueden ser incómodos y hasta doloridos para las patitas de tu pequeño gatito.
Además con una arena sanitaria de granos pequeños le será más fácil hacer el agujero para depositar sus heces a diferencia de una piedra o grano grueso.
Cuando nuestro gato crece ya tiene la capacidad para escarbar los agujeros en la arena a placer, las patitas son más resilientes y sus heces tienden a ser más, tanto en tamaño como en cantidad.
Por lo cual sí se puede introducir gradualmente a una arena de grano más grueso y con más capacidad de absorción de olor y líquidos. Una arena aglomerante de grano medio es ideal para un gato adulto.
Una arena sanitaria de gran poder aglomerante y de absorción de olores como Super Mix Arena o Canada Litter Multicat es ideal para gatos adultos.
Las piedras sanitarias como Tidy Cats Arena Sanitaria de Purina también son una buena opción, esta absorbe olores y es económica. Esta presentación en piedras no es aglomerante por lo que se requerirá su cambio más a menudo.
Procura que la arena que elijas no levante polvo o lo haga de forma mínima. El polvo de alguna arenas puede irritar los pulmones de tu gato.
Tips para el uso de arena sanitaria
La elección del arenero, la ubicación del mismo y la elección de la arena son aspectos esenciales para maximizar la higiene de tu gato.
Sin embargo, hay algunas cosas que te pueden servir a la hora de manejar este aspecto de la salud de tu gato:
- Usar un arenero cubierto para evitar la propagación de olores volátiles como el de la orina de nuestros gatos
- En la medida de lo posible, usar arena aglomerante de grano fino y sin perfume. Esto porque muchas veces nuestros compañeros felinos rechazan estas fragancias.
- Limpiar el arenero frecuentemente, esto ayudará a que tu gato nunca rechace su lugar en el mundo para defecar y adquiera la sana costumbre de hacerlo en un solo lugar.
- Poner el arenero lejos de donde come, de su guarida (el lugar donde pasa más tiempo) y ubicarlo en un lugar limpio y espacioso.
- Existen aditivos que se agregan a la arena que te ayudan a identificar problemas urinarios en tu gato ya que cambian de color de acuerdo al pH de la orina. Un buen ejemplo de esto es Ultra Monthly Monitor de Ultra Pet.
Conclusión
Al final del día, tu gato es el que elige el tipo de arena sanitaria que prefiere usar.
No es aconsejable hacer cambios bruscos si ya se acostumbró a un tipo de arena. Estos cambios podrían producir un rechazo de plano a la arena, cosa completamente indeseada.
Un cambio abrupto en la arena podría tener repercusiones en el uso del arenero y le puede generar estrés a nuestro gato.
A la hora de cambiar la arena del arenero, asegurate de incorporar la nueva arena a medida que te deshaces de la arena sucia.
Siempre hay que prestarle atención a la respuesta que nuestro gato pueda tener frente a la arena.
Si demuestra incomodidad al cambio, nuestro gato nos este diciendo que no aprueba el cambio de arena.
Tu gato ama la limpieza, mantener un arenero limpio hará que ame ir al baño y se mantenga limpio y juguetón como siempre.