Mi gato bebe mucha agua

Si notas que tu gato está consumiendo una cantidad anormal de agua es importante que estés atento a la posibilidad de que tenga algún problema de salud. En este artículo te explicamos qué puede ocasionar que tu gato beba mucha agua

    Tabla de contenidos

  1. Los gatos y el agua: una relación complicada
  2. ¿Cuánta agua debería beber un gato?
  3. Causas no patológicas de la sed excesiva en gatos
  4. Causas patológicas de la sed excesiva en gatos
    1. Enfermedad renal crónica
    2. Hipertiroidismo
    3. Diabetes Mellitus
    4. Otras patologías que pueden causar sed excesiva en gatos
  5. ¿Qué hacer si mi gato toma mucha agua?
    1. Es verano o tu casa es muy cálida
    2. Posible problema con el agua o el bebedero
    3. Tu gato come únicamente comida seca
  6. Conclusiones

Como dueño de un gato probablemente ya estás empapado de cuál es su rutina, por ejemplo de sueño y de su humor.

Esto significa que puedes reconocer cualquier cambio significativo que podría indicar un problema. 

Si estás acostumbrado a cargar una o dos veces al día el agua a tu  pero ahora necesitas hacerlo más seguido quizás debas prestar atención por si hay algún problema.

En este artículo te explicamos cuánta agua debe beber un gato y cuándo deberías preocuparte si tu gato bebe demasiada agua por día.

Los gatos y el agua: una relación complicada

Como te explicamos en nuestro artículo acerca de hidratación en gatos los gatos no son criaturas conocidas por consumir mucha agua, de hecho, necesitan la mitad de agua que los perros por kilo de peso corporal.

Esto debido a que, al ser netamente carnívoros, obtienen casi toda el agua que necesitan de sus presas (recordar que el músculo de un animal suele tener más de 70% de agua)

Por esto, al tener un gato con nosotros, es importante que tratemos de estimular el consumo de agua para que pueda desarrollar su función urinaria y renal de manera normal.

¿Cuánta agua debería beber un gato?

Para saber cuánto es demasiado, primero tenemos que saber cuánto es lo normal:

La sed es un mecanismo de regulación del agua corporal y uno de los síntomas más comunes de deshidratación. 

Cada michi es diferente y cada uno beberá agua de acuerdo a su estilo de vida, salud y factores ambientales. Por ejemplo, un gato que vive dentro de una casa fresca, no ingerirá la misma cantidad de agua que un gato que está más activo y que pasa más tiempo fuera de la casa.

Tené en cuenta que una buena parte del agua que ingiere tu gato puede proceder de su comida. 

La comida húmeda, es en su mayoría agua, por lo que si tu gato sigue una dieta de comida húmeda no necesitará beber tanto como un gato que solo se alimenta con comida seca.

Como nota: tu gato no debería comer sólo comida humeda ya que puede terminar generando formación de placa bacteriana en sus dientecitos. Como solución, acompaña sus croquetas con comida húmeda o procura cepillarle los dientes de forma periódica.

La cantidad de agua que debería beber un gato al día en función de su peso es la que sigue:

  • Gatitos de hasta 3 meses o 1,4kg: 70 ml (un cuarto de vaso).
  • Gatitos de hasta seis meses o 2,7kg: 135mL (la mitad de un vaso).
  • Gato mediano de hasta 4kg: 200 mL o un vaso lleno.
  • Gato grande de 6kg en adelante: al menos 300 mL (un vaso y un cuarto)

Una ingesta mayor a estos números se considera excesiva. Ese fenómeno tiene el nombre de polidipsia o sed excesiva. Está asociada a la diuresis excesiva o poliuria.

Causas no patológicas de la sed excesiva en gatos

La polidipsia no es obligatoriamente el síntoma de una patología. Hay factores externos o el estado fisiológico de tu michi que pueden provocar una mayor sed.

  • Temperatura: las altas temperaturas activan los mecanismos de osmorregulación necesarios para regular la presión osmótica y la temperatura del medio interno a través de la ingesta de agua excesiva. 
  • Condición fisiológica: Una gata que está lactando, necesitará beber más.
  • Actividad Física: Los gatos son animales inquietos, especialmente aquellos que les dan la confianza de salir a un patio o alrededores. En estos casos, necesitarán más agua que si tu gato es sedentario.

Causas patológicas de la sed excesiva en gatos

Si bien la polidipsia o sed excesiva puede tener causas normales como las mencionadas más arriba, existen algunos casos en los que el exceso de sed tiene un origen patológico que debe ser tratado por un veterinario.

Los más comunes:

Enfermedad renal crónica

Alrededor de 1-3% de todos los gatos padecen una enfermedad renal crónica. Con el tiempo, los riñones se debilitan cada vez más y por ende, también el equilibrio hídrico de tu gato.

Cuando esto sucede no pueden retener el agua como deberían.

En su lugar, todo el agua pasa a la orina, lo que causa que tu gato sienta la necesidad de tomar agua más seguido. Algunos otros síntomas son anorexia, pérdida de peso y vómitos.

Hipertiroidismo

Hasta un 11% de gatos mayores padecen hipertiroidismo. La glándula tiroides produce la hormona tiroidea, que es responsable del metabolismo, entre otras.

Cuando la glándula produce demasiada hormona, el metabolismo aumenta y puede ocasionar cambios en el comportamiento de tu gato y cuando el metabolismo aumenta, también lo hace la sed. 

Diabetes Mellitus

La tasa de gatos que padecen Diabetes Mellitus es de 0,5%. Esta enfermedad se produce cuando tu gato no produce suficiente insulina, 

La falta de producción de esta hormona, responsable de regular el nivel de glucosa en la sangre, hace que la concentración de la misma se eleve sin tener a donde ir (normalmente la glucosa es llevada hacia la mitocondria celular por la propia insulina).

Ante esta situación, los riñones expulsan la glucosa a la orina y el agua sigue a la glucosa para poder diluir la orina. Esto podría aumentar la sed de tu gato.

Otras patologías que pueden causar sed excesiva en gatos

Además de las mencionadas anteriormente, otras patologías que pueden estar asociadas a una sed excesiva en gatos son:

  • Infecciones uterinas.
  • Diarrea: puede ser ocasionada por bacterias, virus, otros microorganismos e incluso algún cambio brusco en su dieta.
  • Vómitos o fiebre ocasionados por otro tipo de circunstancias o dolencias.
  • Enfermedades hepáticas: pueden estar asociadas con un mayor consumo de agua.
  • Otras: enfermedades más graves como el cáncer también pueden traer consigo un exceso de consumo de agua de parte de tu gato.

Como siempre recomendamos, ante la mínima duda de que tu gato pueda estar consumiendo un exceso de agua debido a circunstancias que no tengan que ver con lo externo, debes acudir a un veterinario para así obtener un diagnóstico adecuado.

¿Qué hacer si mi gato toma mucha agua?

Si se ha descartado que tu gato padece alguna de las enfermedades anteriores, pero igual ingiere mucha agua, estás pueden ser algunas de las causas, averigua cuál:

Es verano o tu casa es muy cálida

Si podes atribuir el exceso de bebida de tu gato a un factor ambiental, basta con que vigiles su salud general y comportamiento. 

Mientras esté sano y feliz y reciba agua fresca, debería estar bien. 

Un aumento de temperatura significativa, hará que tu gato consuma un poco más de agua de lo habitual, así que mantén agua fresca y en abundancia disponible a toda hora.

Posible problema con el agua o el bebedero

Si tu gato está bebiendo agua de fuentes poco habituales, como grifos que gotean, asegurate que no haya ningún problema con el agua que le das de beber. 

Muchos gatos huyen de los bebederos que no están relucientes, y al igual que nosotros, prefieren el agua fresca.

Te podemos recomendar este bebedero dosificador de nuestro catálogo para que tu gato tenga siempre agua disponible.

Pero atención: es posible que el agua de donde vivas (como en Santa Cruz), sea muy dura por lo que no sólo debes asegurarte de que el bebedero de tu gato esté lleno siempre sino que, idealmente, lo llenarás con agua de botella.

Tu gato come únicamente comida seca

Si tu gato ha pasado recientemente de la comida húmeda al alimento seco, puede experimentar un aumento de sed. 

Echa un ojo, siempre teniendo en cuenta que los gatos que consumen únicamente comida seca necesitan beber más agua.

También considera que es posible que tu gato sea algo quisquilloso con los lugares en donde toma agua, por herencia de su comportamiento cazador, el gato prefiere consumir agua lejos de donde come (debido a al posibilidad de que exista contaminación cruzada).

Por ello, es recomendable que tu gato tenga varias fuentes de agua alejadas de su plato de comida.

Conclusiones

Los gatos, por su naturaleza, no beben demasiada agua.

Lo normal es que si tiene mucha sed y bebe más agua de lo normal, deberías prestar atención.

Podría ser que el incremento en su sed sea normal debido a condiciones de su entorno o que las condiciones sean patológicas (en cuyo caso debes acudir al veterinario lo antes posible).

Las causas no patológicas, tienen que ver con el ambiente de tu hogar, la temperatura, su condición fisiológica y la actividad física que realicen

En algunos casos, la polidipsia (exceso de sed) y la poliuria (exceso de orina) son el primer indicador de una patología que subyace, pero no una patología en sí. 

En el peor caso, pueden ser patológicas, y enfermedades como hipertiroidismo, diabetes mellitus y la insuficiencia renal crónica, podrían ser las causalidades. 

Para saber si tu gato está sano y no está bebiendo agua de más, debes cuidar su alimentación e hidratación. Cualquier signo significativo que rompa sus patrones de sed, es motivo para acudir a un veterinario. 

Finalmente, es importante considerar que si tu gato te demanda más agua, no debes negársela, ya que el daño podría ser más grande.

Espero que esta información te haya sido de ayuda. De así serlo, comparte y comenta!