¿Para qué sirven las almohadillas de los gatos?

Te explicamos cuál es la funcionalidad de las almohadillas en los gatos, además de los cuidados que debes en las almohadillas del tuyo.

    Tabla de contenidos

  1. ¿Por qué los gatos tienen almohadillas en sus patas?
  2. Anatomía de la almohadilla de la pata del gato
  3. El rol de las almohadillas de las patas de los gatos
  4. Estabilidad y amortiguación
  5. Marcar el territorio y otros usos de las feromonas
  6. Una forma de refrescarse
  7. Información medioambiental
  8. ¿Cómo debo cuidar las almohadillas de las patas de mi gato?
  9. Datos extraños y divertidos de las almohadillas de tu gato
  10. Huella dactilar única
  11. El color de las almohadillas varía según el pelaje
  12. Los gatos tienen distintos números de dedo por pata
  13. Sensibilidad
  14. Garras retráctiles
  15. La ciencia ha aprendido sobre las almohadillas de los gatos
  16. Conclusiones

Las patas de los gatos son muy especiales, desde sus habilidades para trepar y su misteriosa psicología, ¿pero para qué sirven las almohadillas de mi gato? No solo sirven para caminar. 

Sin duda las almohadillas son importantes para los 

gatos para sus habilidades de escalador así como de protección, ¿pero sabes lo que necesitas saber?

Las almohadillas de un gato son sorprendentemente blandas como fuertes y un vistazo más de cerca revela muchas cosas interesantes sobre ellas que hacen que nuestros amigos felinos sean aún más geniales. 

Estos animales parecen no tener miedo cuando trepan los árboles y saltan desde grandes alturas. Sin dudas, parecen conscientes de las ventajas anatómicas de sus patas y almohadillas.

En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre las almohadillas de tu gato, para qué sirven y qué cuidados necesitan. 

¿Por qué los gatos tienen almohadillas en sus patas?

Aunque pensamos saber mucho acerca de los gatos, algunos aspectos de su fisiología y comportamiento siguen siendo únicos y muchos siguen siendo desconocidos para muchos. 

Uno de los aspectos que nos impresiona es su excelente capacidad de caza y atletismo. Si no, ¿cómo explicarías que tu michi sale desde una alacena alta sin hacerse daño? Este logro se debe en parte a la anatomía de sus patas y pies así como a sus almohadillas aparentemente resistentes a los impactos.

Pero, ¿qué son exactamente las almohadillas de los gatos y cómo funcionan? Averigüémoslo continuando con la lectura. 

Anatomía de la almohadilla de la pata del gato

La mayoría de los gatos tienen cinco dedos en las patas delanteras y cuatro en las traseras, como la mayoría de las patas de los perros también. 

Las patas delanteras incluyen un quinto llamado espolón; no interviene en el andar, pero es importante porque desempeña un papel en la escalada y caza. 

Cada dedo tiene una almohadilla asociada y cada pata de gato tiene una almohadilla central, más grande, llamada almohadilla metacarpiana en la parte delantera y almohadilla metatarsiana en la parte trasera. 

Las patas delanteras también tienen una pequeña almohadilla más arriba llamada almohadilla carpiana. Las almohadillas están compuestas de tejido adiposo o graso unido por colágeno, un tipo de tejido conjuntivo y recubiertas de piel dura. 

Las uñas de los gatos no son como las uñas de los humanos: las nuestras crecen de la carne al final de los dedos; pero la de los gatos crecen de los huesos al final de las patas, por eso parecen adelantadas.  

Los gatos son caminantes digitígrados, lo que significa que en lugar de caminar sobre los talones y las puntas de los pies como los humanos, lo hacen sobre las puntas de los pies y las yemas de los dedos. 

El rol de las almohadillas de las patas de los gatos

El para qué sirven las almohadillas de un gato, tiene más de una explicación y cuando vemos a nuestros michis interactuando con lo que les rodea, todo cobra sentido. 

Veamos las funciones de las almohadillas de los gatos y por qué son tan importantes, ya que van desde su habilidad para trepar hasta para hacerlos únicos entre sí.

Estabilidad y amortiguación

En conjunto, las almohadillas de las patas de un gato actúan como amortiguadores naturales. También permiten a los felinos detectar la superficie sobre la que se desplazan y caminar en silencio cuando es necesario. 

La acción de las almohadillas de las patas también explica en parte la capacidad del animal para aterrizar con seguridad.

Esto depende de la distribución del impacto entre las patas delanteras y las traseras. Los gatos pueden juzgar de forma innata cómo aterrizar en función de la altura desde la que saltan. 

Las almohadillas absorben los golpes, protegiendo huesos y articulaciones cuando saltan o aterrizan. Además las almohadillas ofrecen un agarre increíble, lo que permite a los gatos moverse con agilidad en una gran cantidad de superficies, ya sean lisas, rugosas o incluso verticales. 

Sin duda, esta habilidad hizo que muchos tengan la creencia de que los felinos tienen nueve vidas que llegó a nivel de mito popular. Al fin y al cabo, pueden sobrevivir a caídas que la mayoría de los demás animales no podrían.

Marcar el territorio y otros usos de las feromonas

Las almohadillas de los gatos, no solo les protegen de las caídas y superficies. En ellas hay glándulas odoríferas que permiten a los michis marcar su territorio. Estos animales conocen el mundo principalmente a través del olfato, como la mayoría de las especies del orden Carnivora (grupo de mamíferos especializados en comer principalmente carne).

Las feromonas son un sistema de señalización olfativa esencial en los felinos. Su uso tiene inicio en el nacimiento, con la unión de la madre y su cría. 

Si tu gato ha amasado alguna vez tu regazo, fuiste testigo directo de su función. Los olores liberados son inodoros para nosotros, pero transmiten sensación de confort para los gatos. Incluso los gatos grandes amasan (tigres por ejemplo). 

Sin embargo, las feromonas sirven para otros fines. Estas señales químicas también son vitales en la reproducción para influir en el comportamiento de una posible pareja gatuna.

Una forma de refrescarse

Las patas del gato cumplen otra función fundamental para los felinos. Ayudan a los animales a refrescarse en cierta medida gracias a las glándulas sudoríparas situadas en ellas. 

Recordá que las almohadillas no tienen pelo, pero sí una piel áspera y gruesa para proteger sus patas. El pelaje de un gato hace que tener glándulas sudoríparas por todo el cuerpo no sean tan eficaces. 

En su lugar, se encuentran en las partes del cuerpo con nada de pelo o poco, como las almohadillas. Los felinos sudan por la misma razón que nosotros, para refrescarse, pero normalmente prefieren buscar un lugar fresco y oscuro. 

Así que las almohadillas de sus patas desempeñan un papel importante en la regulación térmica de los gatos. 

Información medioambiental

Las patas de los gatos son increíblemente sensibles, casi como antenas que exploran su entorno. 

Gracias a los miles de receptores sensoriales de sus almohadillas, los gatos pueden detectar las más mínimas variaciones de textura, temperatura e incluso presión bajo sus patas. 

Esto les permite esconderse o cazar con total discreción. 

¿Cómo debo cuidar las almohadillas de las patas de mi gato?

Ahora que sabemos de la importancia que juegan las almohadillas, es esencial entender que merecen atención y cuidados de parte nuestra. Cortarle las uñas desde pequeño es recomendable. 

También es aconsejable revisar sus patas y entre los dedos en busca de lesiones, objetos extraños, infecciones u otros problemas. 

El lamido excesivo es una señal reveladora de un problema en esa área o cualquier área en realidad. 

Un tratamiento con crema hidratante o un bálsamo hidratante, puede ser útil y suele ser recomendado en estos casos, sobre todo si las almohadillas de tu gato están secas y presentan grietas. 

Datos extraños y divertidos de las almohadillas de tu gato

Las almohadillas de las patas de tu gato también tienen datos interesantes que hacen más únicos y sorprendentes de lo que ya sabemos que son los michis. 

Huella dactilar única

Cada gato tiene su propia huella dactilar, que es como su carné de identidad. Estas impresiones están formadas por líneas y patrones únicos en las almohadillas de las patas delanteras y traseras. Incluso entre hermanos de la misma camada, no hay dos huellas iguales. Eso es lo que hace que cada gato, literalmente, sea realmente especial y único. 

El color de las almohadillas varía según el pelaje

Las almohadillas de las patas de nuestros amigos felinos pueden tener diferentes colores según su pelo. 

Por ejemplo, los gatos de pelaje claro suelen tener las almohadillas color rosa o claro, mientras que los michis de pelaje oscuro suelen tener las almohadillas más oscuras, incluso a veces negras. Es como un toque de color concorde a su juego de pelaje. 

Es otra forma encantadora de ver la diversidad de los gatos y de su belleza única. 

Los gatos tienen distintos números de dedo por pata

Las patas de los gatos son uno de los misterios de la naturaleza. Tienen cinco almohadillas en la parte delantera pero solo cinco en las patas traseras. Además, los gatos son muy silenciosos cuando caminan. Esto se debe a que caminan con las puntas de las patas, utilizando solo las almohadillas la mayor parte del tiempo. 

Sensibilidad

Las patas de los gatos son muy vulnerables a las lesiones. Sus almohadillas son blandas y flexibles, pero pueden lesionarse fácilmente con superficies ásperas, afiladas o calientes. Los gatos son muy conscientes de su propia fragilidad y suelen tener especial cuidado con sus patas. 

Garras retráctiles

Las garras retráctiles de los gatos son como armas secretas, escondidas entre las almohadillas hasta que las necesiten. Estas afiladas garras se retraen en vainas especiales bajo la piel, lo que permite a los gatos caminar, trepar y saltar con facilidad sin dañar sus preciadas garras. Cuando cazan o se sienten amenazados los gatos pueden desplegar sus garras en abrir y cerrar de ojos, listos para defenderse o atacar. Además, podemos comprobar el estado o recortar las uñas de un gato presionando sobre la almohadilla. Esto hará que la garra salga automáticamente. 

La ciencia ha aprendido sobre las almohadillas de los gatos

Los investigadores han estudiado a fondo la anatomía de las almohadillas de las patas de los gatos para desarrollar calzado para paracaidistas. 

Crearon un fluido semiviscoso que reproduce el tejido adiposo para disipar la fuerza de reacción del terreno del aterrizaje, igual que un felino tiene sus almohadillas para que reacciones de forma similar. 

Parece que los gatos y la naturaleza aún tienen mucho que enseñarnos. 

Conclusiones

La evolución y la selección natural han dotado a los felinos de excelentes adaptaciones. Las patas de un gato son mucho más que simples herramientas de locomoción, les permiten explorar y cazar sin peligro de sufrir lesiones por caídas y hacer menos ruido al caminar. 

A través de sus patas y almohadillas, los gatos revelan un mundo de curiosidad, agilidad y sutil comunicación a la vez que adquieren confianza por la amortiguación y agarre que sus almohadillas les dan. 

Su capacidad de equilibrar la temperatura, sus garras retráctiles y la protección que les dan, incluso influyendo a la ciencia, dan fe de la complejidad y adaptabilidad de estos fascinantes animales felinos. 

La anatomía y fisiología única del gato le permiten saltar y aterrizar de alturas increíbles y acechar a sus presas en silencio para mejorar sus posibilidades de supervivencia. Puede que nunca vuelvas a mirar a tu michi de la misma manera después de conocer su anatomía única.