Probióticos y prebióticos para perros

Aprende qué son los probióticos para perros, cuál es la diferencia con los prebióticos y cuáles son los beneficios y formas de uso de ambos elementos para la dieta de tu peludito y las ventajas para su salud

    Tabla de contenidos

  1. ¿Qué son los probióticos y prebióticos para perros?
  2. ¿Cómo actúan los probióticos y prebióticos para perros? 
  3. ¿Cuándo se debe usar los probióticos y prebióticos?
  4. ¿Cuánto tardan los prebióticos y probióticos en hacer efecto?
  5. Señales que tu mascota podría necesitar probióticos 
  6. ¿Todos los perros necesitan probióticos?
  7. Siete consejos veterinarios para dar probióticos a tu perro

Probióticos, prebióticos, en el mundo de la salud digestiva canina circulan muchos términos científicos. 

A medida pasa el tiempo, se le va dando mayor importancia a la salud intestinal de los perros ya que se sabe que no tiene sólo que ver con la función digestiva.

Pero ¿cómo asegurarnos de que todo está funcionando correctamente en el estómago de nuestro perro, si no sabemos qué son los probióticos y prebióticos y cómo pueden ayudar a nuestros peludos?

Los probióticos y probióticos son esenciales para promover la armonía en el intestino de tu perro. En este artículo te mostramos la importante relación entre ambos y cómo incorporar sus potentes facultades de protección intestinal, a la dieta de tu perro. 

¿Qué son los probióticos y prebióticos para perros?

Los probióticos y prebióticos para perros son una potente combinación nutricional. Por separado, pueden realizar funciones muy distintas, pero juntos garantizan un entorno muy equilibrado y sano en el intestino al favorecer el desarrollo de bacterias “amistosas” que tu perro necesita para digerir eficientemente sus alimentos, absorber sus nutrientes, prevenir enfermedades y mantener un sistema inmunitario sano. 

Probióticos para perros

Es una sustancia- a menudo microorganismos vivos- que estimula el crecimiento de flora beneficiosa en el tracto intestinal. Los probióticos pueden ayudar a mantener la flora intestinal existente o a reponer la flora sana que se ha reducido o eliminado. 

Cuando se administran a un perro, los probióticos pueden venir en forma de suplemento, de comida húmeda o seca de alta calidad, o como alimento integral y natural. 

El yogur vivo es un buen ejemplo de fuente natural de probióticos, pero verduras como las zanahorias o los espárragos también contienen buenas dosis de probióticos. 

Prebióticos para perros

Esta sustancia- generalmente un alimento rico en fibra- favorece el crecimiento de bacterias intestinales "amistosas". Los prebióticos "alimentan" a estas bacterias buenas para favorecer un microbioma intestinal sano y equilibrado

Los prebióticos están compuestos de carbohidratos, a diferencia de los probióticos, no son digeribles por el organismo de un perro, sino que actúan como fuentes de alimento para las bacterias “amistosas” ya presentes.

De la misma manera que los probióticos, los prebióticos para perros pueden suministrarse en forma de suplemento, como alimento húmedo o croquetas; o a través de alimentos naturales ricos en prebióticos como la raíz de radicheta  las hojas de diente de león. 

¿Cómo actúan los probióticos y prebióticos para perros? 

Cuando tu perro termina una comida rica en nutrientes, es cuando los probióticos y prebióticos se ponen a funcionar para fortalecer…

Los probióticos: se digieren, descomponen y liberan en forma de bacterias saludables en el intestino y tracto intestinal de tu perro. Si piensas en la palabra “probiótico”, eso es exactamente lo que hacen estas bacterias: se suman al clima de bacterias “aliadas” del microbioma digestivo de tu perro

Los prebióticos: por el contrario no son digeribles para el organismo y viajan indemnes por el estómago y los intestinos del perro hasta llegar al colon. Ahí se convierten en ácidos grasos de cadena corta y en ese momento es que se convierte en una fuente de alimento para las bacterias “amigas” que habitan allí, lo que hace que se fortalezcan y se desarrollen. 

La combinación de probióticos y prebióticos es una excelente forma para que tu perro mantenga una buena fuente de salud intestinal, por lo que usualmente se encuentran juntos en los suplementos digestivos para perros. 

Esta complementariedad de sus propiedades beneficiosas para la salud de los perros se conoce como simbióticos.

¿Cuándo se debe usar los probióticos y prebióticos?

Hay bastantes situaciones en las que resulta útil reforzar la salud intestinal de tu perro equilibrando su flora intestinal.

Incluso con los problemas de aseo, como la diarrea o estreñimiento, puede ser una señal de que tu perro podría beneficiarse de más probióticos y prebióticos en su dieta. 

Un intestino sano debería hacer que tu perro hiciera descargue con regularidad y que sus heces no fueran demasiado duras, blandas o húmedas.

Si los probióticos aumentan la flora intestinal, es decir, las bacterias sanas del intestino, los antibióticos hacen todo lo contrario: eliminan todas las bacterias, incluidas las buenas, para lograr su cometido de eliminar una infección. 

Cuando tu perro estuvo con tratamiento con antibióticos, complementa su dieta con prebióticos y probióticos para equilibrar su flora intestinal y que pueda volver a mover su cola rápidamente. 

Lo quieras creer o no, una serie de problemas no digestivos también puede tener su origen en un desequilibrio intestinal. Los probióticos y prebióticos, pueden ayudar a aliviar el picor de la piel, las alergias, las infecciones por hongos o el estrés de los perros. 

Un aumento de las flatulencias de perro, también podría ser un signo de desarmonía en el intestino que puede necesitar atención. 

¿Cuánto tardan los prebióticos y probióticos en hacer efecto?

Esto depende del perro, pero las mejoras en los problemas de estómago o de aseo, deberían notarse a los pocos días de introducir los probióticos y prebióticos, e incluso pueden reducir el tiempo de recuperación a la mitad. 

Si el problema digestivo de tu perro es algo más serio, los probióticos y prebióticos pueden tardar entre cuatro y seis semanas en hacer efecto. Si los utilizas como parte de un plan preventivo, puedes darle prebióticos y probióticos todos los días. 

Tené en cuenta que no todos los perros necesitan un refuerzo de prebióticos y probióticos, ya que pueden estar recibiendo lo suficiente a través de su dieta. 

Es muy poco probable que los simbióticos para perros causen algún daño, pero se necesita una investigación más exhaustiva sobre sus efectos distintos tipos de raza, edades y condiciones de salud, así que consulta con tu veterinario antes de introducirlos a la dieta de tu perro.  

Señales que tu mascota podría necesitar probióticos 

Tu perro podría necesitar un tratamiento probiótico si:

1.Se está recuperando de una enfermedad: los perros experimentan una amplia gama de síntomas de enfermedades, y siempre es posible que la salud intestinal se vea afectada negativamente. Los cambios en la dieta, virales, bacterias, hongos, infecciones parasitarias, e incluso ciertos alérgenos pueden alterar la salud intestinal de tu mascota, creando la necesidad de reconstruir su microbioma intestinal. 

2. Toman antibióticos: los antibióticos pueden ser útiles para tratar ciertas infecciones y enfermedades, pero también pueden causar un desequilibrio bacteriano en el intestino.

3. Diarrea: Los perros que sufren anomalías en sus descargas (heces blandas a líquidas, cambios de color, presencia de sangre y/o mucosidad, etc.), por estrés, enfermedad, o sensibilidad alimentaria tienen un mayor riesgo de sufrir impactación de la glándula anal y complicaciones relacionadas.

4. Gases: ¿Pueden las flatulencias de tu mascota despejar una habitación? Los gases excesivos o especialmente apestosos pueden ser un signo que el intestino de tu mascota no funciona correctamente, ya sea debido a una intolerancia alimentaria o a un desequilibrio bacteriano preexistente. O de una infección subyacente por bacterias patógenas (dañinas), hongos, parásitos o virus. 

5. Estreñimiento: los problemas de defecación pueden hacer esfuerzos al ir al baño o producir heces duras y con aspecto de piedritas. Los cambios en la microbiota intestinal pueden empeorar el estreñimiento

¿Todos los perros necesitan probióticos?

En un mundo perfecto, nuestras mascotas tendrían dietas perfectamente equilibradas, nunca enfermarían y no necesitarían antibióticos. Pero, por supuesto, la vida de los dueños de mascotas nunca será tan sencilla. 

Como responsables de ellos, nos esforzamos al máximo por cuidar a nuestras mascotas, pero incluso los perros más sanos pueden verse afectados por enfermedades y alteraciones intestinales. 

Aunque una dieta sana, rica en prebióticos y probióticos naturales, puede ayudar a mejorar el funcionamiento del sistema digestivo de tu perro, algunas enfermedades pueden debilitar gravemente o diezmar su microbioma intestinal. 

Para reponer la población necesaria de bacterias amistosas en su intestino, es posible que tu perro necesite tu ayuda para encontrar un suplemento probiótico adecuado. 

Un buen ejemplo del uso necesario de probióticos es el de los perros con antecedentes de haber sido tratados con antibióticos. 

Siete consejos veterinarios para dar probióticos a tu perro

Los probióticos, al igual que cualquier suplemento para perros, requieren seguir unas reglas para lograr mejores resultados. 

1. Empezá despacio

Al empezar a tomar un nuevo probiótico, es probable que tu perro experimente síntomas gastrointestinales adversos. A medida que la nueva microbiota se adapta al microbioma intestinal de tu mascota, estos síntomas pueden ser normales en la mayoría de las mascotas. Sin embargo, para ayudar a prevenir que los síntomas en tu mascota sean extremos, intentá comenzar con media dosis del probiótico durante una semana, antes de subir a la dosis completa. 

2. No mezclar probióticos

Una forma segura de empeorar los trastornos intestinales, es mezclar cepas y marcas a la vez. Esto puede dificultar identificar qué probióticos están ayudando o perjudicando la función gastrointestinal de tu mascota, y hacer más fácil un sobrecrecimiento bacteriano. 

3. Prueba y error

No te preocupes si tu mascota, hinchazón u otros síntomas mientras se adapta a un probiótico. Eso no significa necesariamente que los probióticos no sean adecuados para tu mascota, pero puede indicar sensibilidades o alergias a ciertas cepas de microorganismos (recordemos que los probióticos son microorganismos) u otros ingredientes utilizados en el suplemento probiótico.

4. Tené en cuenta la cepa

Tu mascota puede reaccionar más favorablemente a una cepa probiótica que a otra. Si encuentras un probiótico que va bien con tu mascota, toma nota de la cepa, como referencia futura. 

5. Espera a que hagan efecto

En la mayoría de los casos, los probióticos y prebióticos no serán una cura de la noche a la mañana para los problemas digestivos de tu mascota. Especialmente con las mascotas que necesitan reconstruir su flora intestinal, los beneficios de un microbioma intestinal equilibrado tomarán tiempo. Calculá de unos días a semanas de uso diario antes de calibrar si la cepa está ayudando a tu mascota.

6. Uso diario o según las indicaciones

Parte del periodo de "espera para que actúe", incluye la administración diaria de probióticos al perro. Añadir un polvo probiótico para perros a su comida o darle un masticable probiótico a la misma hora todos los días, dará a tu mascota una mayor oportunidad para obtener resultados óptimos.

7. Escalonar con antibióticos

Una cosa que querrás evitar es dar probióticos a tu mascota demasiado cerca cuando está tomando una dosis de antibióticos prescritos. Por si aún no lo adivinaste, el "pro" y el "anti", no van de la mano, lo que significa que los probióticos tomados cerca de una dosis de antibióticos pueden reducir la eficacia de la terapia probiótica.